
El tradicional desfile del Día del Trabajo, estuvo marcado por la marcha alterna que hicieron los docentes de las secciones 8 y 42 del SNTE, quienes caminaron apartados en un evidente reclamo en contra de los gobiernos.
En el caso de la 8, reclamaron los embates de Morena y la 4T en contra de la dignidad laboral de los maestros federales, mientras que los de la 42, reclamaron justamente todo el desorden que se mantiene en Pensiones Civiles del Estado.
Para colmo, en el acto cívico que encabezó el secretario general de Gobierno, Santiago de la Peña Grajeda, Doroteo Zapata y otras personalidades locales, no estuvieron presentes los líderes sindicales, Eduardo Zendejas ni Manuel Quiroz.
**
Los asuntos internos del PAN en Juárez, siguen calentándose, y es que la subsecretaria Austria Galindo, busca a todos tiros retomar el control del Parque Central, sin importar que tenga que enfrentarse a Rafa Loera y compañía.
Su origen fronterizo le otorga una ventaja significativa, pues conoce los gustos, intereses y necesidades de quienes frecuentan este emblemático espacio. Incluso, serviría para reavivar las negociaciones para reactivar el proyecto de construcción del centro de convenciones en la zona oriente del parque.
El asunto está en que los grupos blanquiazules están bastante confrontados en sus ideas, y lo que para unos parece el mejor proyecto, para otros sería la tumba política, de ahí que se estén dando con todo, sin que Daniela Álvarez haga algo para evitar que la fractura siga creciendo.
**
Arturo Medina, coordinador de los diputados del PRI en el Congreso de Chihuahua, acusó al Gobierno Federal de ignorar las necesidades del campo chihuahuense, especialmente al entregar el agua de la presa El Granero a Estados Unidos en cumplimiento del Tratado de 1944, en medio de una crisis de sequía. Medina considera que esta medida, junto con otras decisiones del gobierno de la 4T, refleja un desprecio por el sector primario, vital para la economía de la región.
El PRIista ha enumerado una serie de agravios, como la negativa a liberar recursos extraordinarios para enfrentar la sequía, la eliminación de subsidios a la energía eléctrica para el campo y la desaparición de programas clave como la Financiera Rural. Estos recortes y omisiones han dejado a los productores sin herramientas necesarias para enfrentar los retos climáticos y económicos, exacerbando una crisis que ya afecta gravemente a los agricultores.
Medina señala que, al entregar el agua y despojar al campo de apoyo vital, el Gobierno Federal demuestra una falta de empatía y un desinterés por las necesidades de quienes sostienen el sustento del país. Su crítica no solo pone en evidencia las fallas del gobierno en la atención al campo, sino que también denuncia un abandono palpable hacia las comunidades que dependen de estos recursos para sobrevivir.